Oler a tu pareja puede tener un efecto calmante

[winche]

Oler a tu pareja puede tener un efecto calmante



Alguna vez le has pedido ropa a tu pareja para no echarle de menos? ¿O te has puesto su ropa cuando no está? ¿O quizás has dormido en su lado de la cama mientras estaba de viaje? Esas reacciones de cariño que nos surgen espontáneamente pueden tener relación con una causa inesperada: la calma que nos produce un olor conocido, como puede ser el de la pareja.

Es olor de hogar, de confort y tranquilidad. Todos reconocemos el olor de la persona que convive con nosotros, pero, ¿cómo de tranquilizador puede ser ese olor? Un estudio realizado por la Universidad de Columbia Británica, en Canadá, descubrió que el olor de la pareja puede tener un efecto calmante.

Concretamente esta investigación de la American Psychological Association ha concluido que, en situaciones de gran estrés y nervios, antes de recurrir a medicamentos para aliviar los síntomas, tener cerca a la persona que amas sería podría ser mucho más reconfortante.

Así, según el trabajo, titulado ‘Olfactory cues from romantic partners and strangers influence women’s responses to stress’ y publicado en el Journal of Personality and Social Psychology, oler las prendas de ropa de la pareja sería una técnica efectiva para calmarse.

“El olor de otra persona puede activar recuerdos, desencadenar emociones y provocar atracción romántica”, recalcan los expertos, quienes inciden que, hasta el momento, todavía no se sabía casi nada “acerca de cómo los aromas humanos influyen en las respuestas al estrés”.

Por ello llevaron a cabo esta investigación, en la que se concluyó que, sentir el olor de la persona que amas, ayuda a disminuir los niveles de cortisol, que es la hormona del estrés.

El olor de la pareja reduce el estrés de las mujeres
Para llevar a cabo el ensayo, los expertos analizaron el comportamiento de 96 parejas heterosexuales. Por un lado, les pidieron a los hombres que usaran una camiseta durante 24 horas, sin aplicarse desodorante, perfume o cualquier otro producto que pudiera alterar el olor del cuerpo.

Tras este período, se les entregó la camiseta correspondiente a sus parejas, junto con otras dos: una que no había sido usada y otra que había sido vestida por un extraño. Las voluntarias fueron sometidas a pruebas de estrés (prueba de estrés social de Trier) y se les obtuvieron muestras de saliva para la medición de cortisol.

Finalmente, los expertos vieron que, cuando las mujeres olían la camiseta usada por su pareja, presentaban niveles reducidos de estrés. Sin embargo, cuando sentían el olor de otro hombre, las tasas de cortisol se mostraban elevadas.

Así, según indica el estudio, “el estrés percibido se redujo en las mujeres que estuvieron expuestas al olor de su pareja”. Concretamente, la reducción “se observó durante la anticipación y recuperación del estrés. Los niveles de cortisol estaban elevados en las mujeres que estuvieron expuestas al olor de un extraño. Esta elevación se observó durante la anticipación del estrés, el estrés máximo y la recuperación del estrés”.

En definitiva, el trabajo actual habla del papel fundamental de las señales olfativas humanas en la comunicación social y revela que los aromas sociales pueden afectar las reacciones tanto psicológicas como fisiológicas al estrés.

Aunque, hasta el momento, solo se han realizado estos estudios en mujeres porque, según explican los expertos, ellas son consideradas más sensibles a los olores. En un futuro está previsto llevar a cabo una investigación que revele si estos mismos resultados se pueden ver en los hombres.